¿Techo desmontable de escayola o de pladur?

Optar por un techo desmontable de escayola o por uno de pladur es una decisión importante y que despierta algunas dudas a nuestros clientes. Por este motivo, en ParaTuReforma hemos preparado una guía para que dispongas de toda la información sobre cuál es el mejor modelo. Recuerda que siempre puedes visitarnos para que te orientemos.

¿Qué son los techos desmontables de escayola?

Se les conoce popularmente como falsos techos y constan de placas de escayola, aunque también puedes estar construidos de otro tipo de materiales.

Estos techos son recurrentes en oficinas y comercios debido a sus numerosas ventajas que más adelante te mostraremos. Su principal función es permitirte esconder todo tipo de elementos. Por ejemplo, cables, tuberías o alarmas de incendios, e incluso puedes acceder a ellos con más facilidad.

La escayola es un material que favorece un cierto grado de personalización, ya que atesora propiedades decorativas que pueden dotar de valor estético al espacio. Puedes encontrar diferentes texturas y colores para crear una vistosa combinación entre ellos. En comparación con otros materiales, en ParaTuReforma te aconsejamos que te decantes por ellos.

Ventajas de los techos desmontables

Los techos desmontables de escayola son cada vez más demandados por los clientes debido a los numerosos beneficios que reportan.

En primer lugar, destaca el fácil acceso a las instalaciones que están ocultas como, por ejemplo, el cableado eléctrico, los conductos de aire acondicionado o los sistemas de iluminación. Este facilita la limpieza, el mantenimiento y las reparaciones, pero sin necesidad de tener que demoler el techo o de llevar a cabo grandes obras y reformas.

A su vez, el aislamiento acústico es una de sus características más reseñables. Esto es posible gracias a la escayola, dado que presenta propiedades acústicas que aíslan el ruido o que lo minimizan. Esto resulta fundamental en espacios como las oficinas o los pequeños negocios.

La escayola también es un material duradero, por tanto, no vas a necesitar reemplazarlo en un largo periodo de tiempo. Eso sí, siempre que realices un mantenimiento adecuado. Esta fortaleza también aplica al fuego. Por ello, el nivel de seguridad en el edificio se ve amplificado.

En otro punto del post nos vamos a centrar en la instalación. No obstante, ya te adelantamos que el techo de escayola es muy fácil y rápido de instalar y desmontar. Esta ventaja contribuye a reducir el tiempo y los costes de la reforma. Esto redunda en que a futuro vas a poder introducir los cambios o las reparaciones que consideres oportunos.

A pesar de ser un techo diferente a los de obra, también se le pueden incorporar sistemas de iluminación de bajo consumo, como los paneles de luz LED. De esta forma, disfrutarás de una iluminación más uniforme y eficiente.

La escayola es un material que si se trata correctamente puede ser resistente a la humedad. Esta característica la convierte en idónea para zonas con alta humedad como son los baños o las cocinas. De este modo, el confort está más que asegurado. La instalación de este tipo de techos aumenta el valor de la propiedad como resultado de sus numerosos beneficios estéticos, acústicos y de funcionalidad.

¿En qué se diferencian con los de pladur?

Tanto el pladur como la escayola son dos opciones muy populares en la construcción de falsos techos. Sin embargo, presentan diferencias significativas que es importante tengas presentes para escoger el adecuado.

Comencemos por el material en sí mismo. La escayola está elaborada con yeso natural, por tanto, permite ser moldeada y decorada de infinitas formas. El pladur, por su parte, está compuesto por una mezcla de yeso y de fibras de papel o de vidrio, recubiertas por cartón. Estas propiedades logran que el acabado sea liso y uniforme. Así, la variedad de acabados se ve limitada.

En cuanto a la resistencia y la durabilidad, la escayola es muy resistente y duradera. El pladur también lo es, pero depende del tipo que selecciones. Posee una menor resistencia a los golpes e impactos y se suele estropear con más facilidad.

Los usos también difieren en estos dos materiales. La escayola suele emplearse para acabados de calidad y con una mayor exigencia en cuanto a decoración. Es idónea para espacios que reclaman una estética más personal. El pladur está más orientado a construcciones residenciales por su bajo coste.El aislamiento térmico y acústico también es diferente. A pesar de que ambos materiales lo ofrecen, la escayola es la más apropiada gracias a su mayor grado de protección y aislamiento.

¿Cómo se instalan los techos de escayola?

La instalación de techos de escayola exige llevar a cabo un orden de pasos. Sin embargo, todos ellos son muy sencillos de realizar. ¡Toma nota!

1. Lo primero que debes comprobar es que el techo esté perfectamente nivelado, es decir, que no haya desviaciones. Si vas a rellenar el falso techo con más materiales aislantes, es recomendable que dejes algo más de longitud.
2. El segundo paso y uno de los más importantes es cortar las chapas de escayola que requieras atendiendo al ancho y largo del espacio. Ten presente cuál es el perfil primario, si hay algún elemento que atraviesa la pared de lado a lado y cuál es la estructura sobre la que se van a sustentar las placas de escayola. Recuerda que el perfil primario se sitúa en el centro y que el resto de las piezas se colocarán con el mismo ancho que las placas desmontables que hayas preparado.
3. Por último, una vez hayas montado la estructura de escayola, ya puedes instalarla en el techo. En la práctica se gana un metro de espacio que te servirá para protegerte de las humedades y de otro tipo de inconvenientes.

¿Te has decidido ya por los techos desmontables de escayola? Si consultas nuestra web, descubrirás un amplio catálogo de placas de escayola para que escojas el número de unidades que precisas. El proceso de compra es seguro, rápido y muy sencillo. No dudes en contactarnos para solicitar presupuesto o recibir asesoramiento personalizado sin compromiso.