Mamparas
Preguntas frecuentes
El tamaño adecuado de una mampara para tu ducha o bañera dependerá del espacio disponible y las dimensiones de tu área de baño. Para determinar el tamaño adecuado, sigue estos pasos:
- Mide el ancho de tu ducha o bañera: Utiliza una cinta métrica para medir el ancho de la zona donde deseas instalar la mampara. Mide de pared a pared o de extremo a extremo de la bañera, asegurándote de tomar en cuenta cualquier saliente o irregularidad en la estructura.
- Determina la altura necesaria: Mide la altura desde el suelo hasta la parte superior de la ducha o bañera. Esto te ayudará a asegurarte de que la mampara cubra adecuadamente el espacio y evite salpicaduras de agua.
- Considera las dimensiones estándar: Las mamparas de ducha y bañera suelen estar disponibles en tamaños estándar. Estos pueden variar según el fabricante, pero generalmente se encuentran en anchos de 70 a 120 centímetros y alturas de 140 a 200 centímetros.
- Ten en cuenta el espacio de apertura: Si optas por una mampara con apertura, como una corredera o abatible, asegúrate de tener en cuenta el espacio necesario para abrir y cerrar la mampara sin obstrucciones. Esto es especialmente importante si tienes un baño pequeño.
Recuerda que es importante medir con precisión y considerar cualquier característica especial de tu baño antes de seleccionar el tamaño de la mampara. Si tienes dudas, siempre es recomendable consultar con un especialista
El nivel de mantenimiento requerido en una mampara puede variar dependiendo del tipo de material y diseño de la mampara. Sin embargo, en general, aquí hay algunas pautas comunes para el mantenimiento de las mamparas:
- Limpieza regular: Es importante limpiar la mampara regularmente para evitar la acumulación de residuos y mantenerla en buen estado. Utiliza un limpiador suave no abrasivo y un paño suave o esponja para limpiar tanto el interior como el exterior de la mampara. Evita el uso de productos químicos fuertes o abrasivos que puedan dañar el material de la mampara.
- Prevención de la acumulación de agua: Después de cada uso, seca la superficie de la mampara con una toalla o paño seco para prevenir la acumulación de agua y reducir la formación de manchas o marcas de agua. Esto ayudará a mantener la mampara más limpia y evitará la aparición de depósitos de cal.
- Protección contra productos químicos: Si utilizas productos de limpieza en tu baño, evita que entren en contacto directo con la mampara, ya que algunos productos químicos pueden dañar el revestimiento o la integridad del material de la mampara. Siempre sigue las instrucciones del fabricante y enjuaga bien la mampara después de aplicar cualquier producto de limpieza.
- Revisión de los elementos de sujeción: Verifica regularmente los elementos de sujeción de la mampara, como tornillos y bisagras, para asegurarte de que estén firmes y en buen estado. Si notas algún problema, como tornillos flojos o desgastados, apriétalos o reemplázalos según sea necesario.
- Mantenimiento específico según el material: Si tu mampara está fabricada con un material específico, como vidrio templado, acrílico o acero inoxidable, es posible que requiera cuidados adicionales o productos de limpieza específicos. Consulta las recomendaciones del fabricante para el mantenimiento adecuado de tu mampara según el material utilizado.
La elección del tipo de apertura de la mampara de baño dependerá de diversos factores, como el espacio que haya disponible en el baño, la estética del lugar, las preferencias personales entre otras muchas cosas. Aquí te presentamos algunas opciones comunes de apertura y sus características:
- Apertura corredera: Las mamparas con apertura corredera son ideales cuando el espacio es limitado, ya que su apertura consiste en desplazarse a lo largo de un riel, por lo que es ideal para baños que no tengan mucho espacio y es una opción práctica.
- Apertura abatible: Este tipo de apertura para las mamparas funciona como una puerta convencional. Este tipo de apertura ofrece una acceso amplio y cómodo a la ducha o bañera, y es adecuada para baños con suficiente espacio libre en el área de la apertura. Además este tipo de apertura es muy fácil de limpiar.
- Apertura plegable: Para baños estrechos recomendamos este tipo de apertura, ya que se pliegan en forma de acordeón, lo que permite un acceso rápido y fácil a la hora de ducharse, no requiere mucho espacio para abrirse y suelen ser ajustable dependiendo de la cantidad de paneles que hayan.
- Apertura pivotante: Las mamparas que tienen este tipo de apertura giran sobre un eje vertical, lo que permite abrir la mampara hacia interior o exterior, hasta con un giro de 180 grados, lo que facilita totalmente tanto la entrada como salida de la ducha o bañera.
Siempre recordar que es importante considerar el espacio disponible en tu baño, así como tus preferencias personales en términos de funcionalidad y estética a la hora de elegir la mampara.