Un sistema único con el cual se pueden calentar de forma sencilla, individual y directa diferentes superficies. De forma completamente diferente a las láminas calefactoras convencionales con el nuevo sistema DITRA-HEAT-E se instalan los cables de calefacción de forma individualizada.
Este sistema ultrafino para el calentamiento de pavimentos funciona también allí donde el uso de suelos radiantes por tubos de agua no son técnicamente viables. El sistema calienta recubrimientos cerámicos allí donde otros no pueden, e incluso donde el espesor exigido es reducido. Además la patentada tecnología DITRA, incorporada al sistema, se ocupa de la desolidarización.
El sistema de los suelos radiantes está compuesto por una lámina de desolidarización y los cables de calefacción con un espesor constructivo de sólo 5,5 mm. Los dos componentes se combinan directamente durante la instalación. Es por esto que las superficies a calentar se pueden definir de forma individualizada, y por ello se adaptan a cualquier planta. Es ideal para su instalación a posteriori, así como para proyectos de reforma.
Del suelo radiante a la pared! La cerámica y la piedra natural son adecuadas, por su facultad de acumular calor, para su empleo en calefacciones de pavimentos, incluso también pueden ser utilizados en la pared.
Nuevos usos gracias a su corto tiempo de reacción
Rápido y sencillo. El sistema es perfecto porque reacciona rápido y produce un calor confortable como calefacción adicional en edificios con muy poca necesidad de calefacción, como por ejemplo la calefacción complementaria en baños, zonas de salón y para el calentamiento de paredes.
Desde el suelo radiante a la pared
La cerámica y la piedra natural tienen la capacidad de acumular calor. ¿Por qué utilizar ésta calefacción de superficie únicamente en en suelo? Caliente las superficies de pared en baño y sala. Notará lo agradable que es el calor suavemente irradiado. La sensación es como tomar el sol en nuestro baño.
Es bueno saber: el empleo de la calefacción de superficie produce una distribución muy uniforme del aire caliente. Por ello hace falta menos temperatura para una calefacción de superficie que para una calefacción con radiadores. El resultado es un clima sano con menor necesidad de calefacción gracias al suelo radiante eléctrico.